"Estábamos en el agua cuando de repente sentí algo cerca mío", contó. Mientras el chico nadaba con su familia en Moonshine Gorge, Australia Occidental, el reptil reaccionó ante sus movimientos y lo mordió. "Me di cuenta de que estaba sangrando, estaba en 'shock' y no entendía qué estaba pasando". Afortunadamente, Cameron no resultó herido de gravedad, solo sufrió heridas punzantes en el codo y el estómago.