Un hombre quedó atrapado en un pozo mientras trataba de extraer agua para su campo de maíz. El hecho sucedió en la ciudad de Fuyang, en el este de China.
Cuando los bomberos llegaron, algunos vecinos ya estaban tratando de rescatar al hombre, pero sin éxito.
El pozo tiene una profundidad de 25 metros y un diámetro de solo 40 centímetros. Afortunadamente, el hombre quedó atorado a 3 metros bajo tierra.
Una excavadora tuvo que retirar tierra para facilitar el trabajo de los bomberos.
Luego de que los rescatistas desmantelaron la primera sección del tubo de cemento que compone la bajada del pozo, vieron al hombre, que todavía estaba consciente.
Tomaron una cuerda y poco a poco lo rescataron.