El boxeador Tyson Fury da positivo por cocaína en un control

El pasado 23 de septiembre el británico Tyson Fury pidió a la Asociación Mundial del Boxeo aplazar su combate revancha contra Vladímir Klichkó, programado para el 29 de octubre próximo. El motivo fue que su representante alegó que Fury se encuentra "médicamente no apto". Sin embargo, hasta el momento la asociación no ha recibido del propio deportista explicaciones sobre los motivos de esta decisión, tal y como se le exigió.

Además, esta es la segunda vez que Fury se retira de su combate con el ucraniano, que fue campeón del mundo hasta noviembre del año pasado. Para la primera fecha designada del encuentro, el 9 de julio, el británico presentaba una lesión de tobillo.

Según informa el sitio web ESPN, este segundo aplazamiento podría estar relacionado con la detección de benzoilecgonina en una muestra aleatoria de la orina de Fury tomada en el Reino Unido. La benzoilecgonina es un analgésico prohibido y el principal metabolito de la cocaína y marcador de su consumo. El mensaje sobre la presencia del compuesto fue enviado a todas las partes interesadas, incluido Klichkó, este jueves por la presidenta de la Asociación Antidopaje Voluntaria (VADA), Margaret Goodman, asegura la edición digital.

Fury todavía tiene derecho "a solicitar el análisis de la muestra 'B' por su propia cuenta", recordó la carta. En caso contrario, sería despojado de los títulos mundiales de la Asociación Mundial de Boxeo y la Organización Mundial de Boxeo en pesos pesados, precisamente aquellos que quería defender en su encuentro con Klichkó.