¿Quiere vivir más? Estos cinco platos japoneses le prolongarán la vida

Es ampliamente conocido que en general los japoneses viven muchos años de manera saludable. Nadie puede describir con exactitud en qué radica su longevidad, pero los expertos creen que está relacionada con la dieta, escribe el rotativo 'Daily Mail'.

El periódico añade que se cree que los platos favoritos de celebridades como Victoria Beckham y Madonna -'sushi', 'miso' y verduras encurtidas- son el secreto de su "espléndida figura".

La especialista en nutrición británica Cassandra Barns ha revelado los cinco alimentos de la dieta japonesa que nos podrían ayudar a alargar nuestras vidas.

Pescado

Según Barns, el pescado es una gran fuente de ácido graso omega 3, responsable de mantener sano el corazón. Este producto también es beneficioso para el cerebro y los ojos y reduce las inflamaciones, una característica de la mayoría de las enfermedades crónicas, desde la artritis hasta las enfermedades cardíacas y el alzhéimer. Además, el pescado es rico en selenio, un elemento vital para nuestras defensas antioxidantes y el sistema inmunológico. 

Productos de soja fermentada

Uno de los secretos de la salud de las mujeres japonesas está relacionado con el consumo de alimentos de soja fermentada. Los compuestos de estos alimentos actúan como fitoestrógenos, sustancias vegetales que tienen en el cuerpo un efecto similar al de los estrógenos.

El consumo de isoflavonas de soja ha sido asociado con un menor riesgo de cáncer de mama y cáncer de endometrio en mujeres después de la menopausia. Además, las isoflavonas contribuyen a mejorar la densidad mineral ósea y la salud cardiovascular, y reducen el riesgo de osteoporosis y de sufrir fracturas.

Barns ha afirmado que "los japoneses tienden a consumir alimentos tradicionales de soja fermentada como 'miso', 'tempeh' y 'natto'". La experta ha indicado que una de las ventajas del proceso de fermentación es que las isoflavonas "experimentan de manera natural unas modificaciones que hace que sean mucho más fáciles de asimilar por el cuerpo" y que la fermentación "aumenta el contenido de vitamina K2, que mejora la salud de los huesos y el funcionamiento del corazón".

Algas marinas

Las algas marinas son ricas en minerales necesarios para nuestro sistema inmunológico, como el yodo, el zinc, el magnesio, el calcio y el potasio, que no obtenemos "ni siquiera comiendo una gran cantidad de verduras, debido a que el suelo en el que crecen puede estar agotado", ha dicho la dietóloga.

Té 'matcha' 

El 'matcha', un té verde tradicional en forma de polvo, cuenta con una alta concentración de un tipo específico de flavonoides llamados catequinas que aumentan las defensas antioxidantes de nuestro cuerpo. También pueden ayudar a protegernos de enfermedades degenerativas como el alzhéimer, las enfermedades del corazón e incluso el cáncer.

Barns ha añadido que "el té 'matcha' contiene mayores cantidades de una sustancia llamada teanina", que tiene un efecto relajante sobre la mente y "puede ayudar a proteger contra los efectos negativos del estrés".

Verduras encurtidas

Las hortalizas encurtidas ayudan a digerir y absorber los nutrientes de los alimentos que comemos, lo que a su vez es beneficioso para todas las áreas de nuestra salud. Las verduras en vinagre fermentadas de manera tradicional son una gran fuente de probióticos naturales. No solo ayudan a luchar contra las infecciones, sino que también contribuyen a prevenir las enfermedades asociadas con el exceso de actividad del sistema inmunológico, como las enfermedades autoinmunes.