En la pausa del partido de baloncesto de la NBA entre Oklahoma y San Antonio en las gradas se celebró una singular competición de baile este sábado entre un hombre obeso y una mujer teñida de rubio. Ambos mostraron todo su arsenal de movimientos, pero el hombre resultó ganador. Sus pasos de baile conquistaron a todos espectadores, lo que le valió un premio de 1.000 dólares.