Por primera vez en 12 años, en una remota isla brasileña del océano Atlántico, se ha registrado un nacimiento, reporta O Globo. Fue una niña y ocurrió el pasado sábado. La isla se encuentra en el archipiélago Fernando de Noronha, que tiene una población de aproximadamente 3.000 personas. En ella los partos no están autorizados debido al hecho de que su hospital no dispone de salas de maternidad.
Las mujeres embarazadas de este pequeño territorio insular deben viajar al continente, y la ciudad de gran tamaño más cercana es Natal, situada a 365 kilómetros. El nacimiento de la niña fue una sorpresa para todos, incluidos sus padres. "La familia dice que no estaba al tanto del embarazo", han afirmado las autoridades locales.
"La madre, que no quiere ser identificada, tuvo el parto en su casa", ha informado la administración de la isla. La mujer, que ya tiene otro hijo nacido en territorio continental, ha asegurado que esta vez "no sintió nada" durante el embarazo.