Un chiste sobre venezolanos, hecho por una humorista peruana durante una presentación en vivo, generó tanto rechazo en las redes que el bar donde hacía su rutina decidió despedirla.
Julisa Milagros, conocida en las redes como 'La Nueva Codiciada,' fue grabada mientras hacía una función en el bar Victoria, en Lima, Perú. "Hay algo que a mí me molesta, y es que hagan chistes sobre los venezolanos", expresó la chica frente a un pequeño auditorio.
"Me molesta bastante, porque siento que somos muy desconsiderados con las personas que nos sirven y atienden tan bien", agregó segundos después, y soltó una carcajada que acompañó el público presente.
Al ver la reacción, remató diciendo: "Llevo cuatro meses contando este chiste y por fin da resultado".
Los comentarios que generó su rutina hicieron que la comediante subiera a su cuenta de Instagram un video para ofrecer disculpas.
Amenazas de muerte
Según Milagros, su intención no era de la ofender, "menospreciar ni criticar" a los venezolanos que han emigrado a Perú ante la crisis económica que atraviesa el país caribeño, ocasionada por la caída en la producción petrolera, la llamada "guerra económica" y las sanciones impuestas por Washington.
La joven peruana afirmó que sabía que el "chiste era malo" y aseguró que no buscaba "incitar a la violencia y mucho menos al odio". "Son chistes que se hacen de todas las nacionalidades", aseveró.
Agregó que tras la viralización del video, recibió mensajes racistas, xenófobos e incluso "amenazas de muerte y comentarios mucho más fuertes".
¿Despedida por un chiste?
Milagros pertenece a un grupo de jóvenes comediantes llamado Frutitetillas Comedy Corp. Al parecer, el bar donde llevaban a cabo sus presentaciones despidió a la joven y publicó en las redes que no se presentará más allí porque "es una vergüenza para nosotros su falta de creatividad".
El club subió una imagen con la bandera de Venezuela y recibió comentarios de apoyo de venezolanos que se sintieron ofendidos por la humorista y que respaldaron la decisión de no permitirle trabajar más en ese bar.
También el grupo de comediantes se pronunció en las redes: acusó a los propietarios del bar Victoria de ser poco profesionales en su relación laboral y agregó que antes de ser despedidos ya habían dejado de trabajar en ese lugar.
Según refirió Milagros, ella había subido el video sobre los venezolanos tres semanas atrás y etiquetado al bar limeño, sin que se produjeran comentarios de desagrado por parte de nadie. "No les pareció discriminatorio ni estuvieron en contra", pero "al recibir los ataques reaccionaron de la peor manera", expresó.