Soldados británicos hicieron frente este miércoles a un 'enemigo' inusual, un juguete sexual que alguien había pegado en el tejado de un cuartel del regimiento de caballería de los Húsares Reales del Rey en Winchester (Reino Unido).
La administración del edificio informó que la eliminación del juguete no era un "trabajo prioritario", por lo que comunicaron que tardaría hasta 40 días en retirar el objeto.
Sin embargo, los soldados decidieron no quedarse de brazos cruzados e intentaron en vano retirar el juguete con una especie de pértiga alargada para alborozo de los espectadores.
Finalmente, los empleados de los servicios del edificio acudieron en su ayuda y eliminaron el dispositivo fálico.