Peter Walkosz, un apicultor de Covert, en Míchigan (Estados Unidos), estaba trabajando en su colmenar hace un par de semanas cuando vio que una abeja se había caído al extractor de miel.
"La rescaté y la puse junto a la entrada de la colmena, pues sabía que sus hermanas la ayudarían", ha relatado Walkosz citado por el portal web UniLad. Y, efectivamente, varias abejas salieron de su colmena y pasaron los siguientes treinta minutos retirando la miel del cuerpo de su congénere, que luego se fue volando.
En el video grabado por Walkosz se ve cómo las abejas unen sus esfuerzos para ayudar a su compañera, rodeándola y frotándola con las patitas para desprender la sustancia adherida a su cuerpo.