Una joven de Barcelona está siendo juzgada por arrancarle la lengua de un mordisco a su pareja cuando este le dijo que quería poner fin a su relación. La acusada le pidió un último beso, momento que supuestamente aprovechó para realizar la salvaje agresión. La Fiscalía española ha solicitado para ella ocho años de prisión, informa El Taquígrafo.
Adaia López Esteve y su exnovio, que no fue identificado, iniciaron su relación tras conocerse en una web de contactos en diciembre de 2016. Dos meses después, la pareja sufrió una ruptura por culpa del fuerte carácter de la chica, destaca el medio, pero posteriormente se reconciliaron y reiniciaron la relación de cero. Sin embargo, el 27 de junio de 2017, la situación de tensión se volvió a repetir.
Tras una gran pelea que llevó a su segunda separación, Adaia abandonó la casa de su novio, pero minutos más tarde regresó con un tono muy diferente y se disculpó antes de pedirle un último beso. El hombre accedió y en ese instante, según la acusación, la joven le arrancó la lengua y la escupió al suelo. A continuación, salió corriendo de la vivienda, dejando a su pareja desangrándose.
La joven será juzgada ante la Audiencia Provincial de Barcelona. La acusación particular ha solicitado diez años de prisión, contemplando el agravante de intención dolosa.
Por su parte, Adaia denunció a su exnovio por malos tratos y pidió un año de cárcel para él. En declaraciones a la televisión La Sexta, la acusada aseguró que el testimonio de su ex es falso, al tiempo que negó sufrir trastornos de personalidad o inestabilidad.
Según su versión de los hechos, la noche del suceso ella intentó salir de casa para ir a un locutorio a cargar su celular, pero su pareja se lo impidió: "Me siguió, me cogió, se puso encima y cuando pasó eso me estaba ahogando". Es "imposible que yo le hiciera nada", alegó la joven tras señalar la diferencia de fuerza entre ambos y que temió por su vida.