El domingo 14 de julio, un niño de 12 años logró burlar la seguridad del aeropuerto de Heathrow de Londres, Reino Unido, y abordar sin pasaje ni billete de embarque un avión de British Airways con destino a Los Ángeles, Estados Unidos.
Según informó The Telegraph, el menor se encontraba entre los pasajeros que debían abordar el vuelo y fue capaz de subir al avión sin presentar ningún documento.
Una vez dentro del avión, la tripulación pidió al niño la tarjeta de embarque para indicarle su asiento correspondiente, y allí fue que los tripulantes se dieron cuenta de que no tenía pasaje. El niño se negó a colaborar con la tripulación y a retirarse del avión, por lo que finalmente la Policía arribó al lugar y se lo llevó.
Según comunicaron fuentes policiales al diario, el menor no es ciudadano inglés y se cree que es nacional de Países Bajos. Asimismo, el medio reporta que los investigadores tienen la teoría de que llegó hasta el aeropuerto londinense como pasajero de tránsito, aunque luego se propuso el desafío de ver cuán lejos podía llegar sin ser detenido.
El vuelo se demoró varias horas, ya que los pasajeros debieron salir del avión, volver a presentar sus papeles y atravesar de nuevo los controles de seguridad.
Una pasajera llamada Rachel Richardson fue comentando a través de Twitter lo que iba aconteciendo mientras se desenvolvían los hechos.
"Casi cinco horas desde que debíamos partir tenemos el visto bueno. Estuve en Heathrow 11 horas", escribió.
Un portavoz de la compañía se disculpó con los pasajeros por las demoras del vuelo: "la seguridad de nuestros clientes y de la tripulación es siempre la máxima prioridad y todos los que abordaron el avión fueron sujetos a chequeos de seguridad".
Scotland Yard dio inicio a una investigación para averiguar cómo el niño pudo llegar a abordar el avión.