Investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts y de la Universidad Politécnica de Milán han desarrollado una aplicación, llamada AIPortraits, que transforma las 'selfies' en obras de arte de reconocidos pintores, como Vincent Van Gogh, Rembrandt, Caravaggio o Tiziano.
Según su creador, Mauro Martino, y su colaborador, Luca Stornaiuolo, el programa utiliza un sistema de aprendizaje automático denominado red de confrontación generativa para crear nuevas pinturas de estilo renacentista, que se asemejan a las fotografías. Al igual que FaceApp, este servicio utiliza dos algoritmos: uno que genera la imagen y otro compara qué tan cerca se encuentra el resultado de la pintura original.
La aplicación fue programada con más de 45.000 retratos clásicos, aunque también se incluyeron otras obras más contemporáneas. A partir de esta base de datos, es posible representar una fotografía como si fuera un cuadro de siglos pasados, pintado por las propias manos de grandes artistas.
Los usuarios no han tardado en probar el nuevo programa y muchos han publicado las imágenes en redes sociales. Sin embargo, ciertas personas están inconformes con los resultados, pues alegan que la aplicación cambió por completo su color de piel o sus rasgos étnicos. Incluso, han comentado que el programa solo sirve para personas blancas.
Los expertos han señalado que si bien existe "una fuerte alteración de los colores", las características principales de la fotografía, como la posición, luminosidad y expresividad, no cambian. Además, insisten en que el objetivo de AI Portraits va más allá de alterar una imagen, pues pretende crear nuevas formas sobre su misma base.
Cláusula de privacidad
Frente a la polémica generada con FaceApp sobre el supuesto acceso a una cantidad excesiva de información sensible sobre los usuarios, AIPortraits ha señalado que todas las fotos se eliminan inmediatamente de los servidores del proyecto para proteger la privacidad de los usuarios.