Chris Silva, jugador del club de baloncesto de Miami Heat, no pudo contener las lágrimas cuando se reunió con su madre por primera vez en tres años.
El joven dejó en 2012 su país de origen, Gabón, con tan solo 16 años y con el sueño de jugar algún día en la NBA. Ha visto a su familia solo una vez en los siete años transcurridos desde entonces.
Carine Minkoue Obame, la madre de Silva, viajó más de 10.000 kilómetros para encontrarse con su hijo. Llegó justamente para el final de su práctica rutinaria el viernes pasado.
"Han pasado 3 años desde que Silva Obame ha visto a su madre por última vez. Esta noche se reunieron y fue todo lo que puedas imaginar y más", escribió el club en Twitter al publicar el emotivo video del reencuentro.
En la grabación, viralizada en las redes, se ve cómo el jugador, rodeado de sus compañeros de equipo, ve de repente a su madre entrar en la cancha. Totalmente emocionado, el basquetbolista se echa a llorar y abraza a su madre ante el aplauso de sus amigos.
La visita sorpresa fue organizada por el comisionado de la NBA, Adam Silver, el vicepresidente senior de operaciones internacionales de baloncesto, Kimberly Bohuny, y el programa de la NBA para África, como regalo de Navidad para Silva.
"No podía creer que era ella la que entró... pensé que estaba viendo un fantasma", confesó Silva. "No pude contenerme. Estaba muy emocionado. Gracias NBA África por este increíble premio. Esto va directo a mi corazón. Han hecho que estas vacaciones sean especiales para mí".