Tailandia prohíbe las bolsas de plástico de un solo uso pero los residentes hallan alternativas creativas

Ante las medidas drásticas, soluciones drásticas. Mientras el Gobierno hace lo que puede para reducir la cantidad de basura que acaba en el mar, los tailandeses no se desesperan por la ausencia de lo que hasta ahora formaba parte de su día a día y se presentan en las tiendas con sus propias soluciones únicas.

En el marco de la campaña contra las bolsas de plástico de un solo uso lanzada por las autoridades, a partir de este año 75 centros comerciales y tiendas con más de 24.500 sucursales por todo el país han dejado de dar gratis las bolsas. Como alternativa, algunos supermercados ofrecen (de pago) bolsas de papel, aunque admiten que no son lo suficientemente fuertes como para servir para compras pesadas.

Los residentes locales más ingeniosos resuelven el problema adaptándose a las nuevas condiciones de vida y ahora van de compras con cubos, enormes macetas de cerámica, perchas, cestas e incluso maletas.

No se sabe a ciencia cierta quién lo hace para reducir la contaminación del medioambiente y los daños a la vida marina y quién se presenta así solo porque el súper ya no da bolsas, pero de todas formas estos tailandeses abrazan los cambios con creatividad.

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