Siempre se pensó que para jugar bien al golf hace falta mucha coordinación y ciertas aptitudes atléticas que no todos tenemos. Y así era hasta que el ingeniero Shane Whigton presentó en su canal de YouTube un palo de golf que mejora los tiros de manera automática.
Gracias a esta obra de la ingeniería robótica, ahora es posible jactarse de ser bueno en ese deporte sin tener que pasar horas y horas entrenando. La ciencia viene en nuestra ayuda y tenemos la ecuación para un buen desempeño: si hay pocas habilidades deportivas, necesitamos más ingeniería inteligente.
El inventor del palo de golf autoajustable describe su experimento de esta manera: "Quería ver si podía convertirme en un mejor golfista, combinando ingeniería robótica y golf. El resultado es un palo robótico que detecta el 'swing' y corrige el tiro en la distancia. Debería ser posible arreglar el 'slice' y el 'gancho', con algunas actualizaciones de hardware y software".
Además, este palo futurístico tiene una modalidad que le permite convertirse en cualquiera de sus variantes, así que ya no hay que cargar con los 11 hierros. El dispositivo es capaz de detectar los diferentes tipos de 'swing' y la velocidad, y ajusta el ángulo de su cabezal para corregir desviaciones y obtener mejores disparos.
Wighton, que ya había diseñado un aro de baloncesto con tablero que atrapa todos los tiros, acepta que los resultados aún no son óptimos, pero asegura que esto mejorará con el tiempo.