Los incendios forestales en Turquía han llegado a zonas residenciales en el sudoeste del país, provocando la evacuación de habitantes y dejando tras de sí al menos tres fallecidos.
Decenas de personas resultaron afectadas a causa de un gran incendio forestal iniciado este 28 de julio en la turística provincia de Antalya, en la costa mediterránea del país.
La localidad costera de Manavgat, 75 km al este de Antalya, parece haber recibido el mayor impacto. Aunque el centro no sufrió, el incendio devastó varias partes en las afueras, dejando tres fallecidos y quemando vivos animales domésticos y salvajes.
Las autoridades evacúan barrios enteros mientras el fuego se extiende rápidamente debido a los fuertes vientos. En la extinción de las llamas participan dos aviones, 15 helicópteros, seis buldóceres y 106 camiones de bomberos.
En la lucha contra los incendios han sido participado aviones anfibios rusos Be-200, según ha confirmado la Embajada rusa en el país.
Este tipo de aeronaves se usan principalmente en misiones de rescate y extinción de incendios. El Be-200 es el único hidroavión de propulsión a chorro del mundo, lo que le proporciona una alta velocidad y un elevado nivel de eficacia a la hora de arrojar agua: hasta 12 toneladas de una vez sobre los focos de un incendio. Para almacenarlas solo necesita planear entre 10 y 20 segundos sobre la superficie de un lago, río o mar.
Las llamas también han llegado al pueblo turístico de Marmaris.
Turquía está viviendo algunos de los días más calurosos del año. De momento se desconocen las causas del siniestro.