Un perrito de dos semanas de nacido fue rescatado con éxito después de que un mono salvaje lo capturó y lo retuvo consigo durante tres días. El hecho se presentó en una urbanización de la ciudad de Seri Kembangan, cerca de Kuala Lumpur, en Malasia.
El primate tomó al cachorro el pasado 16 de septiembre y escapó por las líneas eléctricas. Lo mantuvo entre sus manos sobre un poste de luz y en lo alto de varios árboles, cuando algunos residentes del lugar se percataron del hecho e intentaron salvar al can, que chillaba y se veía incómodo.
Algunos le arrojaron piedras pequeñas y trozos de madera al mono con el ánimo de asustarlo y que dejara caer al cachorro, mientras que otros intentaron atraerlo hacia el suelo con bananos. Finalmente, le arrojaron una especie de petardos, que al estallar provocaron que soltara al perro. Su caída fue amortiguada por la espesa maleza y el follaje.
Cherry Lew Yee Lee, una usuaria de Facebook que participó en el rescate, contó en una publicación que adoptó al cachorro y lo bautizó Saru, palabra que significa 'mono' en japonés. Un veterinario lo revisó y, aunque tenía algunas lesiones leves e hinchazón en la cabeza, su condición era buena. "El mono no pareció lastimarlo, solo sostenía al cachorro mientras se movía. Parecía estar tratándolo como un amigo o su bebé", dijo la joven, citada por Daily Mail.
Los lugareños afirman que el mono era parte de un grupo conocido por robar comida de las casas, y expresaron su preocupación por el hecho de que ahora estaban llevándose mascotas. Se cree que el perrito rescatado había sido arrebatado de una camada callejera.
El Gobierno de Malasia recibe un promedio de 3.800 quejas sobre monos en todo el país cada año, lo que ha llevado a instaurar un programa de sacrificios masivos de estos animales. Hasta 70.000 macacos fueron sacrificados anualmente entre 2013 y 2016.