En los minutos finales del tiempo de descuento de un partido de la liga brasileña de fútbol, disputado en el estadio Maracaná, un jugador fue arrastrado dos veces al campo de juego. La insólita escena tuvo lugar en el encuentro de este domingo, en el que el Botafogo se impuso a Fluminense por 4-2, durante el cierre de la fase regular del torneo carioca. El raro y divertido suceso rápidamente se viralizó en las redes sociales.
El Botafogo iba a ganando 3-2 al Fluminense cuando Yarlen recibió un supuesto golpe en la cara y decidió hacer tiempo fingiendo una lesión. Sin embargo, al llegar fuera de la cancha sus propios compañeros de equipo lo arrastraron al terreno de juego, para que recibiera allí la asistencia médica y de esa forma retrasara el partido a su favor. Al percatarse de esta situación, el portero del equipo rival lo arrastró por los pies fuera de los límites de la cancha. Acto seguido, los jugadores del Botafogo lo empujaron nuevamente al terreno, generándose un fuerte altercado entre los integrantes de ambos equipos.