El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha indignado por la calidad de su retrato en el Capitolio del estado de Colorado.
"A nadie le gusta una mala foto o pintura de sí mismo, pero la de Colorado, en el Capitolio del estado, colocada por el gobernador, junto con todos los demás presidentes, fue distorsionada a propósito a un nivel que incluso yo, tal vez, nunca había visto antes", escribió en Truth Social este domingo.
Trump señaló que la autora del cuadro "podría haber perdido su talento a medida que envejecía" y añadió que preferiría no tener un retrato antes que ese. El mandatario se dirigió al gobernador del estado, Jared Polis, al que calificó de "izquierdista radical" y le pidió que retirara el cuadro.