Los secretos de belleza de la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, quedaron brutalmente expuestos por la revista Vanity Fair.
En esa publicación, que incluye una entrevista con la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, se incorporó una serie de fotografías del círculo cercano del presidente Donald Trump, "retratos que ofrecen una mirada directa al poder y al peligro", según la revista.
En el artículo, el perfil de Leavitt, de 28 años, fue acompañado por una fotografía en primer plano en la que se podían ver claramente los rastros de inyecciones en el contorno de sus labios. La imagen generó un sinfín de comentarios en internet. "Estoy obsesionada con que Vanity Fair publique evidencia de que el odio te envejece", escribió una internauta, mientras otra pidió "una advertencia para la próxima vez".
Incluso el secretario de Estado, Marco Rubio, se pronunicó al respecto. "Es obvio para la mayoría de la gente que Vanity Fair manipuló deliberadamente imágenes [...] para intentar hacer quedar mal al equipo de la Casa Blanca", aseguró en su cuenta de X.
Por su parte, Leavitt criticó la supuesta manipulación de contenido que el medio hizo sobre las declaraciones obtenidas, pero evitó hacer comentarios sobre su retrato.