Un hombre, de algo más de sesenta años, casi pierde la vida después de que se le desgarrara el esófago por comer demasiadas lentejas durante la cena de Navidad en la ciudad italiana de Trentino, informan medios locales.
"Este es un caso raro, clasificado como síndrome de Boerhaave, un desgarro espontáneo y completo del esófago. Suele ocurrir tras un esfuerzo intenso, como un vómito forzado, que provoca que el contenido gástrico y el esófago se derramen en el tórax. Puede ser mortal y se presenta en personas mayores", explicó Alberto Brolese, el cirujano que operó con éxito al anciano.
La operación duró más de cuatro horas y aunque se consiguió salvar la vida del hombre, este todavía se encuentra en cuidados intensivos.