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No presentarán cargos contra 2 policías que mataron a tiros a un afroamericano durante un arresto
El asesinato de Rayshard Brooks provocó protestas masivas en Atlanta en junio del 2020.
El oficial Garrett Rolfe, quien disparó fatalmente a Rayshard Brooks en Atlanta en junio del 2020, y su colega, el oficial Devin Brosnan, no enfrentarán cargos, anunció este martes Pete Skandalakis, director ejecutivo del Consejo de Fiscales de Georgia y fiscal asignado al caso, informa AP.
Skandalakis declaró que los policías actuaron razonablemente cuando usaron la fuerza letal y agregó que se enfrentaron con una situación de "rápida evolución", en el momento en que Brooks se abalanzó y agarró una de sus pistolas táser durante el intento de arresto.
"Dadas las circunstancias rápidamente cambiantes, ¿era objetivamente razonable que [Rolfe] usara la fuerza letal? Y concluimos que sí lo era", afirmó Skandalakis.
El incidente ocurrió en medio de las protestas masivas contra la brutalidad policial y racismo sistémico que inundaron EE.UU. después del asesinato de George Floyd. El fiscal aseguró que el caso de Brooks no tenía relación alguna con el racismo y destacó que "este es un caso en el que los oficiales estaban dispuestos a darle al Sr. Brooks todos los beneficios de la duda y, lamentablemente, por sus acciones, esto fue lo que sucedió".
El abogado de la familia de Brooks, Chris Stewart, afirmó que un jurado debería haber tomado la decisión de acusar a los agentes en lugar del fiscal, citando la complejidad de la situación. Stewart subrayó que los policías pudieron usar la fuerza durante la pelea, aunque "eligieron no hacerlo cuando estaba justificado. Pero decidieron usar la fuerza letal cuando un hombre huía, a 5,7 metros de distancia".
El 12 de junio de 2020, uniformados llegaron a un restaurante de Wendy's en Atlanta, tras varias llamadas quejándose de que un hombre estaba durmiendo en un coche en el carril de acceso directo. Dos policías conversaron pacíficamente con Brooks por 40 minutos y decidieron arrestarle porque había tomado demasiado alcohol para conducir. Sin embargo, el hombre opuso resistencia y los tres forcejearon hasta que la víctima logró agarrar el táser de uno de las policías y disparó a Rolfe, quien tomó su arma de fuego y disparó, matando a Brooks. El incidente fue grabado por las cámaras corporales de los agentes y por testigos.
El hecho causó una ola masiva de las protestas en la capital de Georgia. Rolfe fue despedido al día siguiente y él y su colega enfrentaron cargos, presentados por el entonces fiscal de distrito del condado de Fulton, Paul Howard. No obstante, con el cambio del jefe de la Fiscalía la investigación se reinició y solo este martes Skandalakis anunció que presentará la documentación para retirar los cargos.
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