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Una huelga general amenaza con paralizar Argentina y dejarla sin transporte ni servicios
El sindicalismo opositor a la Administración de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha convocado para este jueves una huelga nacional que, se estima, afectará a todos los servicios del país.
Los sindicatos afiliados a la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), junto con la Confederación General de Trabajadores (CGT), pretenden dejar a la Argentina sin servicios de trenes, autobuses, vuelos nacionales e internacionales, embarcaciones marítimas y fluviales, así como de combustibles, alimentos y recolección de residuos durante las 24 horas de este jueves. La huelga afectará también a bares y restaurantes, luego de que el Sindicato Gastronómico prometiera sumarse a las manifestaciones.
"No vamos a producir ningún incidente. Tenemos que estar precavidos porque el Gobierno, por todos los medios, quiere desvirtuar la jornada de protesta", indicó el secretario general de la CGT, Hugo Moyano, durante una entrevista con una radio local.
Por su parte, la mandataria de este país sudamericano ha reconocido que todos tienen derecho a hacer huelga. Para acallar las críticas que su Gobierno está recibiendo por parte de varios medios locales, la presidenta ha declarado que no se dejará robar la alegría y la certeza de que con todas las dificultades Argentina es un país mucho mejor del que recibió su fallecido esposo Néstor Kirchner en 2003.
"Por supuesto que hay problemas, siempre los tuvimos pero, por favor, que no nos quieran convencer de que todo está mal y todo es horrible", escribió en su cuenta de Twitter Cristina Fernández.
"No vamos a producir ningún incidente. Tenemos que estar precavidos porque el Gobierno, por todos los medios, quiere desvirtuar la jornada de protesta", indicó el secretario general de la CGT, Hugo Moyano, durante una entrevista con una radio local.
Por su parte, la mandataria de este país sudamericano ha reconocido que todos tienen derecho a hacer huelga. Para acallar las críticas que su Gobierno está recibiendo por parte de varios medios locales, la presidenta ha declarado que no se dejará robar la alegría y la certeza de que con todas las dificultades Argentina es un país mucho mejor del que recibió su fallecido esposo Néstor Kirchner en 2003.
"Por supuesto que hay problemas, siempre los tuvimos pero, por favor, que no nos quieran convencer de que todo está mal y todo es horrible", escribió en su cuenta de Twitter Cristina Fernández.
Por supuesto que hay problemas, siempre los tuvimos pero, por favor, que no nos quieran convencer de que todo está mal y todo es horrible.
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) April 9, 2014
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