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La Administración Obama gana el premio Jefferson Muzzle por limitar la libertad de prensa
El Departamento de Justicia de EE.UU. y la Oficina de Prensa de la Casa Blanca han ganado un premio por ser "responsables de algunas de las afrentas más graves o ridículas a los principios de la Primera Enmienda de la Constitución".
Este miércoles, el Centro Thomas Jefferson para la Protección de la Libertad de Expresión, anunció que el Departamento de Justicia de EE.UU. había encabezado la lista de destinatarios del 'Jefferson Muzzle' ('el bozal de Jefferson') de este año, un galardón entregado cada mes de abril desde 1992 "como un medio para atraer la atención nacional a las afectaciones a la libertad de expresión y de prensa y, al mismo tiempo, fomentar el aprecio por los principios de la Primera Enmienda". Esta enmienda es precisamente el texto de la Constitución estadounidense que garantiza estas libertades
La Oficina de Prensa de la Casa Blanca ocupó el segundo lugar entre los 'ganadores' de este año, seguida inmediatamente por un tercer puesto que compartieron la Agencia de Seguridad Nacional y el Departamento de Seguridad Nacional.
No es inusual que esta organización defensora de la libertad de expresión, nombrada en honor al tercer presidente de EE.UU., condene a las agencias federales por violar los derechos constitucionales de los ciudadanos estadounidenses, pero el Gobierno de Obama barrió en los 'premios' de este año, aumentando sin duda la credibilidad a las acusaciones de que la Casa Blanca ha destruido las libertades protegidas por la Primera Enmienda de la Constitución de EE.UU. al interferir y tratar de influir incluso en los principales y más respetados medios de prensa del país.
Según el Centro Jefferson, los honores del primer lugar este año se otorgaron al Departamento de Justicia debido a la incesante y agresiva búsqueda por parte de la Administración Obama de personas acusadas de haber filtrado información del Gobierno.
La Oficina de Prensa de la Casa Blanca ocupó el segundo lugar entre los 'ganadores' de este año, seguida inmediatamente por un tercer puesto que compartieron la Agencia de Seguridad Nacional y el Departamento de Seguridad Nacional.
No es inusual que esta organización defensora de la libertad de expresión, nombrada en honor al tercer presidente de EE.UU., condene a las agencias federales por violar los derechos constitucionales de los ciudadanos estadounidenses, pero el Gobierno de Obama barrió en los 'premios' de este año, aumentando sin duda la credibilidad a las acusaciones de que la Casa Blanca ha destruido las libertades protegidas por la Primera Enmienda de la Constitución de EE.UU. al interferir y tratar de influir incluso en los principales y más respetados medios de prensa del país.
Según el Centro Jefferson, los honores del primer lugar este año se otorgaron al Departamento de Justicia debido a la incesante y agresiva búsqueda por parte de la Administración Obama de personas acusadas de haber filtrado información del Gobierno.
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