Actualidad
Decreto de Obama, ¿un corredor hacia Nuevo México para el Estado Islámico?
El presidente estadounidense Barack Obama ha declarado un área en la frontera con México como zona protegida, algo que impide el control policial en el territorio frecuentado por narcotraficantes y, potencialmente, por terroristas.
Desert Peaks (en el estado de Nuevo México) recibió el estatus de monumento nacional por orden ejecutiva basada en la Ley de Antigüedades, que confiere al presidente el derecho a restringir el uso de terrenos públicos sin aprobación del Congreso.
En el área, de unas 200.000 hectáreas, adyacente al estado mexicano de Chihuahua, ahora se prohíbe cualquier tipo de tráfico salvo a pie.
La Policía del condado de Doña Ana, citada por el portal 'Infowars', ha advertido que la creación de un monumento nacional en la frontera con México les proporciona a los cárteles mexicanos un corredor para el tráfico de drogas, armas y migrantes ilegales hacia EE.UU.
La semana pasada el portal 'Judicial Watch' informó, citando a fuentes gubernamentales, que el grupo islamista Estado Islámico, conocido por sus atrocidades en Irak y Siria, ya cuenta con efectivos en Ciudad Juárez, una urbe mexicana en la frontera estadounidense, muy cerca del condado de Doña Ana.
En este condado se ubica el polígono militar y aeroespacial White Sands, un potencial objetivo para los terroristas.
Otros objetivos potenciales podrían ser la base militar de Fort Bliss, ubicada a 10 kilómetros de Ciudad Juárez, y la base aérea de Holloman, a 140 kilómetros.
El mes pasado el exoficial de operaciones encubiertas de la CIA, Mike Baker, aseguró en una entrevista que hay "mucha comunicación" entre el Estado Islámico y los cárteles mexicanos del narcotráfico.
Baker señaló que el Estado Islámico conoce perfectamente la falta de seguridad existente en la frontera de EE.UU. con México y sugirió que podrían cruzarla con la ayuda de narcocárteles mexicanos.
Además, aseguró que durante los últimos años la inteligencia estadounidense ha recogido datos sobre Al Qaeda y "sus esfuerzos" para "coordinarse con grupos, como por ejemplo, los cárteles mexicanos".
La semana pasada el canal estadounidense Fox News informó, citado a las autoridades de Texas, que los militantes del Estado Islámico muestran un activo interés en las redes sociales sobre un posible cruce de la frontera entre EE.UU. y México.
Sin embargo, algunos expertos consideran que el Gobierno estadounidense usa tales informes como pretexto para inmiscuirse en los asuntos internos de México.
El profesor de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, Víctor Manuel Quintana, rechazó de manera categórica la posibilidad de que existan vínculos de mexicanos con islamistas.
"El Gobierno estadounidense exagera en sus informes debido a sus intereses de intervenir cada vez más en el territorio mexicano", comentó Quintana en una entrevista a RT en 2011.
En el área, de unas 200.000 hectáreas, adyacente al estado mexicano de Chihuahua, ahora se prohíbe cualquier tipo de tráfico salvo a pie.
La Policía del condado de Doña Ana, citada por el portal 'Infowars', ha advertido que la creación de un monumento nacional en la frontera con México les proporciona a los cárteles mexicanos un corredor para el tráfico de drogas, armas y migrantes ilegales hacia EE.UU.
¿El Estado Islámico en Ciudad Juárez?
La semana pasada el portal 'Judicial Watch' informó, citando a fuentes gubernamentales, que el grupo islamista Estado Islámico, conocido por sus atrocidades en Irak y Siria, ya cuenta con efectivos en Ciudad Juárez, una urbe mexicana en la frontera estadounidense, muy cerca del condado de Doña Ana.
En este condado se ubica el polígono militar y aeroespacial White Sands, un potencial objetivo para los terroristas.
Otros objetivos potenciales podrían ser la base militar de Fort Bliss, ubicada a 10 kilómetros de Ciudad Juárez, y la base aérea de Holloman, a 140 kilómetros.
El mes pasado el exoficial de operaciones encubiertas de la CIA, Mike Baker, aseguró en una entrevista que hay "mucha comunicación" entre el Estado Islámico y los cárteles mexicanos del narcotráfico.
Baker señaló que el Estado Islámico conoce perfectamente la falta de seguridad existente en la frontera de EE.UU. con México y sugirió que podrían cruzarla con la ayuda de narcocárteles mexicanos.
Además, aseguró que durante los últimos años la inteligencia estadounidense ha recogido datos sobre Al Qaeda y "sus esfuerzos" para "coordinarse con grupos, como por ejemplo, los cárteles mexicanos".
La semana pasada el canal estadounidense Fox News informó, citado a las autoridades de Texas, que los militantes del Estado Islámico muestran un activo interés en las redes sociales sobre un posible cruce de la frontera entre EE.UU. y México.
¿Pretexto para la injerencia?
Sin embargo, algunos expertos consideran que el Gobierno estadounidense usa tales informes como pretexto para inmiscuirse en los asuntos internos de México.
El profesor de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, Víctor Manuel Quintana, rechazó de manera categórica la posibilidad de que existan vínculos de mexicanos con islamistas.
"El Gobierno estadounidense exagera en sus informes debido a sus intereses de intervenir cada vez más en el territorio mexicano", comentó Quintana en una entrevista a RT en 2011.
comentarios