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Escudo antimisil de EE.UU. en Corea del Sur puede causar carrera de armamento en Asia
La política de EE.UU. en Asia puede llevar a una carrera de armamento en la región, escribe la estatal Agencia Telegráfica Central de Corea, que comenta los planes de Washington de desplegar en la península coreana su sistema antimisiles THAAD.
EE.UU. utiliza a Corea del Sur para implementar su estrategia, que tiene por objetivo conseguir el liderazgo en la región asiática y en el futuro convertir a Corea del Sur en una avanzadilla para una confrontación total con otros grandes poderes. Un plan que puede traer como consecuencia una carrera armamentística en la región, según escribe la agencia citada por Itar-Tass, indicando que el alcance de THAAD supera los límites de la península Coreana.
Pionyang se indignó cuando Washington vinculó sus planes con la amenaza que, según la Casa Blanca, representa Corea del Norte.
"Tras haber inventado el rumor de 'la amenaza de Corea del Norte' para llevar a cabo su estrategia de dominación, EE.UU., detrás de esta cortina, desde hace mucho tiempo recurre a la táctica de establecer sistemas antimisiles apuntando a las potencias regionales", escribe la agencia.
Anteriormente Corea del Norte declaró que ampliará su capacidad nuclear si EE.UU. despliega en Kazajistán sus sistemas antimisiles THAAD. Las acciones de EE.UU. deben ser consideradas como una provocación militar que puede provocar una catástrofe nuclear no solo en la península coreana, sino en todo el noreste de Asia, advierte Pionyang.
Corea del Norte está segura de que el Gobierno de China y otros países de la región también se opondrán al despliegue del sistema de defensa antimisiles estadounidense en Corea del Sur. Esta semana el viceministro de Defensa de EE.UU., Robert Work, declaró que Washington estudia la posibilidad de desplegar el sistema THAAD en Corea del Sur, añadiendo que una batería THAAD ya fue transportada a Guam, una isla en el Pacífico occidental perteneciente a EE.UU. como territorio no incorporado, para "responder a las provocaciones de Corea del Norte". Por su parte las autoridades surcoreanas han negado que Seúl esté negociando con Washington la posibilidad de desplegar el sistema THAAD en su territorio.
Pionyang se indignó cuando Washington vinculó sus planes con la amenaza que, según la Casa Blanca, representa Corea del Norte.
"Tras haber inventado el rumor de 'la amenaza de Corea del Norte' para llevar a cabo su estrategia de dominación, EE.UU., detrás de esta cortina, desde hace mucho tiempo recurre a la táctica de establecer sistemas antimisiles apuntando a las potencias regionales", escribe la agencia.
Anteriormente Corea del Norte declaró que ampliará su capacidad nuclear si EE.UU. despliega en Kazajistán sus sistemas antimisiles THAAD. Las acciones de EE.UU. deben ser consideradas como una provocación militar que puede provocar una catástrofe nuclear no solo en la península coreana, sino en todo el noreste de Asia, advierte Pionyang.
Corea del Norte está segura de que el Gobierno de China y otros países de la región también se opondrán al despliegue del sistema de defensa antimisiles estadounidense en Corea del Sur. Esta semana el viceministro de Defensa de EE.UU., Robert Work, declaró que Washington estudia la posibilidad de desplegar el sistema THAAD en Corea del Sur, añadiendo que una batería THAAD ya fue transportada a Guam, una isla en el Pacífico occidental perteneciente a EE.UU. como territorio no incorporado, para "responder a las provocaciones de Corea del Norte". Por su parte las autoridades surcoreanas han negado que Seúl esté negociando con Washington la posibilidad de desplegar el sistema THAAD en su territorio.
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