Joven investigador ruso, un genio en mecánica
Un joven ruso de la ciudad de Ekaterimburgo investigó, diseñó, recibió la respectiva patente de invención y comienza la producción del nuevo juguete de ensamblaje para los niños.
Daniíl Shostin, alumno de 14 años de una escuela de la capital de la región de los Urales creó un nuevo juguete de ensamblaje 'Kvint' que de momento está en el banco de pruebas. El innovador mecano consiste en tan solo dos piezas de plástico de diferentes formas. Sin embargo, hay más de 30 maneras para interconectarlas.
"Se pueden formar cubos, pirámides, bolas de todos los tamaños. Y si has compuesto una figura de tamaño pequeño, puedes hacer una copia exacta y solo más grande", explicó Daniíl. El joven investigador recibió la patente de su obra y tiene ganas de dar un paso más y lanzar la producción en serie.
Tras una breve instrucción, los niños experimentadores están listos para poner a prueba este invento ruso. Los chicos y sus padres están encantados del nuevo juguete. "Se puede hacer cualquier cosa: una tortuga, muñeco de nieve, telaraña, hombrecitos", explicó Dima Nésterov. "Se conecta bien y es muy fuerte", agregó Daniel Stenin.
Aunque los encargados de testear esta creación tienen tan solo cinco años, encaran la tarea con la mayor seriedad posible. Un poco de creatividad… ¡Y los resultados son impresionantes! Por su parte, los padres comparten el entusiasmo de sus niños. "Fomenta la imaginación creadora del niño, estimula las habilidades motrices", dijo Anna Starkova.
Además, los adultos destacaron la importancia del invento, que puede ser utilizado no solo como un juego, sino también para la investigación científica. Por ejemplo, sus piezas permiten construir modelos de capas nucleares y estructuras atómicas.
"Es insólito no solo para hombres adultos, sino para las empresas. Logró organizar la producción y ahora quiere vender la licencia para este producto. Es un verdadero éxito", dijo Alexéi Zykov, asesor del Consejo Regional de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores.
Cabe añadir que este no es el primer invento del joven genio. A los 12 años ya obtuvo un premio nacional con un modelo de plataforma ártica que funciona con energía solar y eólica. En cuanto al nuevo mecano, tendrá que pasar por una prueba mucho más dura y veraz: la del tiempo.