Misteriosa colaboración entre Google y la NSA
“Una colaboración entre la Agencia de Seguridad Nacional de EE. UU., la NSA, y las compañías privadas como Google es inevitable”, declaró hace dos años el entonces jefe de la NSA Mike McConnel. Esta frase del ex alto cargo de los servicios especiales de EE. UU. fue recordada esta semana cuando la organización sin ánimo de lucro Electronic Privacy Information Center (EPIC) exigió a la NSA que publique los documentos que confirman la colaboración de Google con este organismo.
En concreto, al EPIC le interesan los detalles del ataque masivo contra las cuentas de Gmail de varios activistas y disidentes chinos que tuvo lugar en enero de 2010. El grupo apeló a la Ley de Libertad de Información, insistiendo en que el público tiene el derecho a conocer si en este caso los ciudadanos podrían ser espiados. No obstante, no ha habido 'milagro' de la democracia y el Tribunal de Apelaciones norteamericano ha dictado que para prevenir posibles ciberataques, la NSA no debe revelar ningún acuerdo que tenga con el gigante informático.
Esta decisión reafirma la sentencia de una corte menor que afirmaba que la Agencia no necesitaba negar o confirmar ninguna relación con Google. El presidente del Partido Pirata de Madrid, Daniel Riaño, cree que el veredicto judicial sería un golpe a la privacidad de los usuarios del buscador.
“Toda la noticia está envuelta en tal misterio que no se puede saber nada. Lo que sí que sabemos es que tradicionalmente ese tipo de agencias han abusado del secreto simplemente para no dar ninguna información en cosas que les eran no convenientes para ellos, pero que en ningún momento ponían en peligro la seguridad de sus países ni la seguridad de otras personas. Los términos en los que se ha pronunciado este tribunal hoy podrían permitir que la relación entre la NSA y Google pusiera en riesgo la privacidad de todos los usuarios de Google. En la actualidad no sabemos qué tipo de colaboración tiene Google y la NSA. Lo malo de esta sentencia es que permite que esta relación se vaya haciendo cada vez más intensa y más estrecha sin que ni el Gobierno de EE. UU., ni los ciudadanos de EE. UU., ni el resto de los usuarios de Google tenga jamás noticia ni siquiera de si está habiendo una colaboración entre Google y las agencias de espionaje norteamericanas”, comentó Riaño a RT.
“Es un precedente muy grave. Mes tras mes, desde hace un par de años, se están promulgando leyes que dejan en nada la protección de los derechos a la privacidad de los ciudadanos de EE. UU. y de cualquier ciudadano de cualquier país del mundo que esté usando empresas de telecomunicación que tienen sede en EE. UU. porque en realidad la legislación que está sacando ahora para la protección de la seguridad deja en papel mojado la privacidad de los usuarios. En el fondo lo que ocurre es que con una serie de normas como la CISPA están circunviniendo todo el sistema de protección a la privacidad de los ciudadanos que se había estado edificando durante decenios”, añadió.