En Arabia Saudita ponen precio a la cabeza de Al Assad
Esta declaración viene después de que el sábado aparecieran imágenes que muestran los cuerpos de niños muertos tendidos en el suelo de una mezquita de la localidad siria de Houla, donde el pasado 25 de mayo fueron masacrados más de 100 civiles. Según la información difundida por la ONU, en total fueron asesinados al menos 108 civiles, entre ellos 34 niños. Asimismo unas 300 personas resultaron heridas.
Las autoridades sirias niegan las acusaciones de ser responsables de la tragedia y culpan a los grupos terroristas de esta matanza.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha condenado la masacre.
Al mismo tiempo Rusia, que forma parte del Consejo, declaró que no excluye la posibilidad de que se trate de una provocación.
Los representantes de Arabia Saudita en retiradas ocasiones han solicitado una intervención extranjera en el conflicto sirio y han llamado a suministrar armas a los opositores al Gobierno de Bashar al Assad.