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Moscú promete "una respuesta adecuada" si EE.UU. la sanciona por tráfico de personas
Moscú ha criticado el informe del Departamento de Estado de EE.UU. sobre el tráfico de personas presentado este miércoles y se ha comprometido a dar "una respuesta adecuada" si Washington introduce sanciones contra Rusia.
En el informe anual sobre la lucha contra el tráfico de personas publicado por EE.UU., Rusia y China aparecen en el grupo de países que no hacen lo suficiente para combatir el problema, razón por la que podrían sufrir sanciones.
Según el Ministerio de Exteriores de Rusia, "en vez de un análisis profundo y objetivo de las causas del aumento del tráfico de personas, incluido en el territorio del mismo EE.UU., los autores del documento usan una metodología inadmisible, ya que dividen a los países en grupos de acuerdo a las simpatías o antipatías políticas del Departamento de Estado. Es evidente que daremos una respuesta adecuada a cualquier paso poco amistoso en nuestra contra".
Los diplomáticos rusos detallan que no ha sido una sorpresa que Rusia haya sido incluida en el grupo de los países que podrían recibir sanciones por parte de EE.UU., ya que corresponde a la lógica de los últimos acontecimientos como, por ejemplo, la aprobación de la llamada lista Magnistki que introdujo sanciones contra 60 funcionarios rusos (involucrados, según EE.UU., en violaciones de los derechos humanos). El Ministerio ruso ha indicado que en varias ocasiones Washington ha comunicado a Moscú que iba a empeorar su posición en la 'lista negra' sobre la trata de personas si el país no cumplía con sus recomendaciones.
"Para merecer una nota positiva por parte del Departamento de Estado de EE.UU. debíamos cumplir con el llamado 'Plan de actuación para Rusia', elaborado especialmente para nosotros, que nos instruía a cambiar nuestra legislación y prácticas judiciales sobre la trata de personas, adaptándolas a las normativas estadounidenses. Desde el principio estos requisitos eran imposibles. En su lucha contra el crimen organizado las autoridades rusas nunca se guiarán con las instrucciones elaboradas en otro país y tampoco cumplirá con unas condiciones presentadas de una forma muy parecida a un ultimátum", ha explicado el Ministerio a través de un comunicado oficial.
Insistió, además, que politizar el problema de la lucha contra el tráfico de personas impide el trabajo de las fuerzas del orden en ambos países, ya que obstaculiza el intercambio de experiencias y una cooperación exitosa.
Según el Ministerio de Exteriores de Rusia, "en vez de un análisis profundo y objetivo de las causas del aumento del tráfico de personas, incluido en el territorio del mismo EE.UU., los autores del documento usan una metodología inadmisible, ya que dividen a los países en grupos de acuerdo a las simpatías o antipatías políticas del Departamento de Estado. Es evidente que daremos una respuesta adecuada a cualquier paso poco amistoso en nuestra contra".
Los diplomáticos rusos detallan que no ha sido una sorpresa que Rusia haya sido incluida en el grupo de los países que podrían recibir sanciones por parte de EE.UU., ya que corresponde a la lógica de los últimos acontecimientos como, por ejemplo, la aprobación de la llamada lista Magnistki que introdujo sanciones contra 60 funcionarios rusos (involucrados, según EE.UU., en violaciones de los derechos humanos). El Ministerio ruso ha indicado que en varias ocasiones Washington ha comunicado a Moscú que iba a empeorar su posición en la 'lista negra' sobre la trata de personas si el país no cumplía con sus recomendaciones.
"Para merecer una nota positiva por parte del Departamento de Estado de EE.UU. debíamos cumplir con el llamado 'Plan de actuación para Rusia', elaborado especialmente para nosotros, que nos instruía a cambiar nuestra legislación y prácticas judiciales sobre la trata de personas, adaptándolas a las normativas estadounidenses. Desde el principio estos requisitos eran imposibles. En su lucha contra el crimen organizado las autoridades rusas nunca se guiarán con las instrucciones elaboradas en otro país y tampoco cumplirá con unas condiciones presentadas de una forma muy parecida a un ultimátum", ha explicado el Ministerio a través de un comunicado oficial.
Insistió, además, que politizar el problema de la lucha contra el tráfico de personas impide el trabajo de las fuerzas del orden en ambos países, ya que obstaculiza el intercambio de experiencias y una cooperación exitosa.
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