El ADN contiene pistas que predicen nuestra 'fecha de caducidad'
En el marco del estudio publicado en la página de la Universidad de Edimburgo, los científicos calcularon el reloj biológico de las personas, comparando su edad real con la edad determinada por los cambios químicos en su ADN conocidos como la metilación. Observaron que las personas cuya edad según su reloj biológico era mayor que su verdadera edad eran más propensas a morir.
En los cuatro estudios realizados por separado, los investigadores observaron la vida de unas 5.000 personas durante 14 años. La edad biológica de cada persona fue calculada a través de una muestra de sangre y los participantes fueron seguidos durante todo el estudio.
Los investigadores encontraron que hay cierta relación entre un reloj biológico que funciona más rápido de lo normal y la muerte prematura, incluso teniendo en cuenta otros factores como el tabaquismo, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
"Los mismos resultados en cuatro estudios indican un vínculo entre el reloj biológico y las muertes", explica Riccardo Marioni, del Centro para el Envejecimiento Cognitivo y Epidemiología Cognitiva de la Universidad de Edimburgo. "De momento no está claro si el estilo de vida o factores genéticos influyen en la edad biológica de una persona", agregó.