31 años: la edad de la belleza perfecta para una mujer
Sociólogos británicos llegaron a la conclusión de que la belleza de una mujer florece a la edad de 31 años. Señalan que es la cima de la hermosura de una joven porque ya está más segura de sí misma y encontró su propio estilo. Además, se hizo experta en maquillaje y aprendió a elegir ropa que subraye sus ventajas y oculte los pequeños defectillos.
Basaron sus datos en encuestas que habían realizado entre 2.000 hombres y mujeres del país. Resultó que para un 70% de los encuestados el criterio principal de verdadera belleza en una mujer es la seguridad en sí misma. El criterio de la apariencia física resultó quedar en segundo lugar con un 67% de votos a su favor, mientras que el tercer factor más importante, con un 47% del total, fue el estilo personal. Al parecer, los hombres británicos incluyeron en éste último también la personalidad de una fémina.
Además, derrumbaron el otro estereotipo. Resulta que los hombres no consideran que las mujeres más jóvenes sean más atractivas. Afirman que el equilibrio óptimo entre belleza física, estilo y la sensación de autoconfianza se desarrolla después de los 30 años.
A la edad de 31 años, una mujer ya se siente mucho más segura de sí misma que a los 20. Tiene ya una imagen bastante clara acerca de su lugar en el mundo, ya sabe qué es lo que quiere y cómo es ella, se entiende mejor a sí misma. Además, tiene ya una experiencia muy variada en relaciones sociales con casi todo tipo de gente.
Casi dos tercios de las mujeres encuestadas admitieron la exactitud de la frase 'la Hermosura viene con la edad'. Más de la mitad reconoció que con la edad se olvidaban de sus complejos y empezaban a sentirse más guapas. Además, un 55% comentó que, al pasar el 'umbral' de los 30 años, tuvo la sensación de haber aprendido finalmente a darse el maquillaje óptimo para su tipo de cara.
Otro detalle interesante: las mujeres residentes en la capital se mostraron más seguras de sí mismas que sus coetáneas de otras regiones del país.
Por último, los sociólogos descubrieron que una mujer británica cuenta con un presupuesto promedio de unas 105 libras (unos 160 dólares) mensuales para perfeccionar su belleza natural.