El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Economía

EE.UU. quiere "un caos controlado" en Pakistán para debilitar a China

Publicado:
Washington está creando un "eje de inestabilidad" en China, con Pakistán como detonador en su centro. Tiene como objetivo debilitar las posiciones estratégicas de Pekín, opina el analista político Nikolái Malishevski.
EE.UU. quiere "un caos controlado" en Pakistán para debilitar a China
Los ataques de 'drones' estadounidenses contra el territorio pakistaní parecen indicar que la alianza entre los dos países ha llegado a su fin, un extremo que confirman las reacciones de Islamabad, que en varias ocasiones ha cerrado temporalmente la ruta que sirve para el tránsito de cargamentos de la misión de la OTAN en Afganistán e incluso ha permitido responder con fuego a las tropas de la OTAN sin esperar una orden 'de arriba'.

A eso se suman los intentos de Washington de obstaculizar que Pakistán e Irán lleguen a un acuerdo respecto a la construcción del gasoducto South Pars-Multan. Este proyecto tiene como objetivo conectar Multan, la quinta ciudad de Pakistán, al yacimiento de gas natural más grande del mundo, conocido como South Pars-North Dome. Este yacimiento se extiende por el golfo Pérsico y ocupa aguas territoriales de Irán y Catar. Según los expertos, el proyecto South Pars-Multan, con un coste estimado de 7.500 millones de dólares, es de gran importancia geopolítica, tal como demuestra el deseo que ha manifestado la India de unirse al tratado. Como alternativa en caso de una negativa por parte de Nueva Deli, Islamabad ofreció a Pekín incorporarse al proyecto. La propuesta pakistaní, sumada al interés que suscitó en las autoridades chinas, impulsó a EE.UU. a acelerar la realización de otro proyecto, el gasoducto Turkmenistán-Afganistán- Pakistán-India, destaca Malishevski

Los dos proyectos pasan por el puerto pakistaní de Gwadar, en Baluchistán. Esta provincia suroccidental constituye el 40% del territorio de Pakistán y tiene un valor estratégico excepcional, ya que permite controlar las vías marítimas y terrestres del golfo Pérsico e Irán, alberga yacimientos de gas natural y oro y en ella se encuentra el polígono nuclear de Chagai. Según Malishevski, instalarse en Gwadar le permitiría a China facilitar en un futuro la importación de petróleo iraní y abrir una nueva puerta económica hacia Asia meridional y Oriente Próximo acortando las rutas de comunicación. El experto opina que otra de las ventajas que ofrece el puerto pakistaní para China es la posibilidad de ubicar una base de su marina en el mar Arábigo.

Estas perspectivas estorban los planes de EE.UU., insiste el analista. Cabe recordar que ya en 2006 fueron objeto de filtraciones mapas elaborados por EE.UU. en los que Baluchistán aparecía como un estado independiente, mientras que Pakistán quedaba reducido únicamente a dos provincias (Punyab y Sind), habiendo pasado el resto de sus territorios bajo administración afgana. Según Malishevski, Washington quiere ver un Pakistán desintegrado para crear un "vacío energético" entre Irán y China. Además, planea utilizar a los extremistas pakistaníes contra Teherán. Desde su punto de vista, "el caos controlado" que EE.UU. está creando en Pakistán (ya sea intensificando el conflicto indio-pakistaní o agudizando las tensiones tribales dentro del país musulmán) tiene un único objetivo: permitir a Washington hacerse con el control del tránsito de hidrocarburos del golfo Pérsico a Asia oriental. El experto opina que la 'primavera pakistaní' podría estallar tan pronto como en 2014.
comentarios
RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7