Negocio inhumano: exigen en España ley que proteja a los animales del tráfico y maltratos
En una de las últimas operaciones de la Guardia Civil contra el tráfico ilegal de cachorros las autoridades han hallado setenta y tres perros de diferentes razas en un cargamento procedente de Praga, República Checa. Ninguno de ellos llega a los tres meses, edad mínima requerida para ser transportados. Tampoco disponen de la documentación sanitaria que exige la Unión Europea.
"La mayoría de los cachorros que se venden en las tiendas en España, podríamos decir un 90%, vienen de países del este: Hungría, Eslovaquia, etc. Y proceden de criaderos en los que los animales viven en situaciones terribles, las hembras explotadas para parir. Unas condiciones verdaderamente terribles. Si la gente pudiera ver esos criaderos no compraría animales", afirma la presidenta del departamento jurídico de Justicia animal Matilde Cubillo.
Las condiciones de cría son terribles, al igual que las de transporte. En la mayoría de los casos los perros llegan a España tras pasar al menos tres días de viaje en furgoneta, hacinados y sin comer. En ciertas ocasiones se ha hallado más del 70% de los animales muertos.
"Me gustaría pedir a la gente que está pensando en comprarse un animal, que se lo piense antes porque para tener un animal a lo mejor han muerto muchos en el trayecto. Además muchos de ellos vienen con problemas congénitos porque crían sin ningún control y después de ocasionar cantidad de gastos a la familia acaban muriéndose a las pocas semanas de haber llegado a sus nuevas casas", asegura la presidenta de la Asociación para libertad y bienestar animal Carolina Corral.
"Tienen muchos parásitos internos y ello va unido a las condiciones que decíamos antes de falta de higiene, una inadecuada alimentación; además son separados muy tempranamente de sus madres, con lo cual reciben poco aporte de leche materna que les aumenta la inmunidad. Es la única inmunidad que ellos tienen de momento. Los parásitos son muy frecuentes”, lamenta el médico veterinario Manuel García.
Desde las asociaciones animalistas aseguran que existen dos motivos por los que la gente continúa comprando estos perros. Por un lado, porque son de razas cotizadas y se venden más baratos que a precio de mercado. Por otro, en la mayoría de los casos de transporte ilegal, las cartillas sanitarias están alteradas y las familias no sospechan de su procedencia ilícita.
Sólo en la comunidad de Madrid se calcula que cada semana entran ilegalmente más de 500 cachorros; miles y miles en toda España. Paradójicamente, España es el primer país de la UE en número de mascotas abandonadas, más de 150.000 al año. También se producen millares de sacrificios.
En el país nadie entra en prisión por traficar, maltratar o incluso matar a un animal. Las penas son menores a los dos años. Organizaciones como el Partido animalista contra el maltrato animal reclaman una ley estatal de protección de los animales para este año 2015.
"Nosotros reivindicamos que en el Código penal, en ciertos casos de maltrato animal, se vaya a la cárcel como ocurre en otros países europeos. Hay casos aquí terribles que en otros países como Francia o Alemania esa persona estaría varios años en la cárcel”, asevera Matilde Cubillo.
Una mayor concienciación social y apostar por la adopción responsable antes que por la compra indiscriminada de cachorros son, afirman los expertos, dos asignaturas pendientes de cumplir para poder dejar de estar en la cola de Europa.