Rusia honrará con un monumento a los 30.000 militares soviéticos caídos en la Guerra Fría

Un conjunto arquitectónico que honrará a los soldados soviéticos y rusos que no regresaron de los campos de batalla durante la Guerra Fría será instalado en la Colina Poklonnaya de Moscú, comunicó este martes el vicepresidente del Comité de la Duma (Cámara Baja del Parlamento ruso) para Defensa, Franz Klintsevich, citado por la agencia Interfax.

"Los nombres de todos los internacionalistas caídos fuera de la Patria, y se trata de más de 30.000, no solo en Afganistán, sino también en Vietnam, Corea, Nicaragua y otros 'puntos calientes' serán grabados en estelas especiales que serán erigidas este verano en la Colina Poklonnaya", anunció Klintsevich, que encabeza la unión rusa de veteranos de la guerra en Afganistán.



Las estelas serán construidas al lado del monumento a los soldados soviéticos que no regresaron de Guerra Fría instalado en este parque conmemorativo de la Segunda Guerra Mundial.

La Guerra Fría derivó en decenas de guerras regionales y conflictos armados. En más de 30 de ellos, que abarcaron 17 países y cuatro continentes, participaron militares soviéticos.

Todas las guerras de la segunda mitad del siglo XX parecen ya exóticas para la 'memoria colectiva' de la nación. Tal vez destaque entre otras la de Afganistán que costó la vida a más de 15.000 soldados soviéticos e involucró a cientos miles de personas.

Los primeros que supieron que en este lejano país combatían sus hijos fueron las madres de los soldados y sus vecinos. Con el tiempo, un ataúd de zinc, un 'tulipán negro' (apodo de avión que transportaba los ataúdes a la patria) y los veteranos sin piernas o sin brazos se convirtieron en elementos inseparables de la realidad soviética en los años 80.