La empresa británica Reaction Engines ha revelado los detalles del propulsor Sable, capaz de llegar a cualquier punto del mundo en cuatro horas o de volar incluso al espacio exterior, informa el portal 'ScienceAlert'. La empresa está desarrollando dos proyectos ambiciosos que usarán el propulsor: el avión supersónico LAPCAT A2, con capacidad para 300 pasajeros y una velocidad 5 veces mayor que la velocidad de sonido y el avión-cohete Skylon, que podrá llevar personas y hasta 15 toneladas de carga al espacio a un coste 95% menor que los vehículos espaciales existentes, según 'Daily Mail'.
Una particularidad de estos aviones es la ausencia de ventanas, aunque se propone una alternativa: monitores que muestren imágenes cambiantes para que los pasajeros no sientan claustrofobia.
El secreto de la velocidad del propulsor Sable radica en un sistema de enfriamiento que podría reducir la temperatura de los motores en menos de un segundo. La empresa asegura que las primeras pruebas del propulsor real se llevarán a cabo en el año 2019.