La construcción de la base militar china se está llevando a cabo en las islas de Nantszi, situadas a 300 km de las islas de Senkaku, que Japón considera su territorio, informa la agencia japonesa Kyodo.
Se observa que la creación de esta base militar forma parte de la preparación de China para responder a una posible crisis militar en la región, así como fortalecer sus capacidades de inteligencia. Según la agencia, ya están instalados varios radares grandes y construidas pistas de aterrizaje.
La disputa territorial sobre las islas Senkaku entre Japón y China se ha intensificado después de que Tokio anunciara en septiembre del 2012 su intención de comprar las islas, que estaban en manos de propietarios privados. Desde entonces, los barcos de patrulla chinos están constantemente presentes cerca de las islas en disputa.