Según la compañía que opera la planta, Autoridad del Valle del Tennessee (TVA), el agua contiene tritio radiactivo, informan los medios locales.
En TVA aseguraron que la fuga de agua radiactiva de una línea de drenaje en la central nuclear cerca de la ciudad de Athens, fue rápidamente eliminada y no representaba una amenaza para la población local. La misma ocurrió el 10 de enero.
Presumiblemente, el accidente ocurrió debido al mal funcionamiento de una de las válvulas. Al mismo tiempo, la empresa reconoció que el contenido de sustancias radiactivas en el agua superaba los estándares permisibles.
Expertos de TVA llevaron a cabo una serie de inspecciones en la zona de la central nuclear, pero no encontraron ningún rastro de contaminación radiactiva.