La decisión de EE.UU. de aliviar algunas restricciones comerciales y financieras sobre Cuba, que entra en vigor el viernes, es el primer paso concreto del acercamiento entre La Habana y Washington y del movimiento del presidente estadounidense, Barack Obama, hacia el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Cuba, escribe Reuters.
"А fin de cuentas, tenemos que levantar el embargo sobre Cuba, espero un debate sano en el Congreso, pero no preveo que vaya a suceder inmediatamente", afirmó Obama durante su rueda de prensa anual. Por su parte Raúl Castro dio la bienvenida al deshielo y a la normalización de relaciones bilaterales.
Las enmiendas han sido aplicadas con la intención de abrir el comercio y el apoyo a los ciudadanos cubanos, pero los estadounidenses ahora también podrán viajar al país sin pedir permisos especiales. Aerolíneas y agencias de viajes podrán ofrecer un servicio a Cuba sin una licencia específica. Los turistas estadounidenses podrán utilizar tarjetas de crédito en sus viajes a Cuba y llevarse suvenires por un total de 400 dólares, incluidos 100 dólares en alcohol o tabaco.
Las regulaciones facilitan también las relaciones entre Cuba y EE.UU. en áreas de telecomunicaciones e instituciones financieras. Los estadounidenses podrán enviar más dinero a Cuba: 2.000 dólares en vez de 500 cada tres meses.
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