"Recibí unas cartas en las que el Estado Islámico y los talibanes se anuncian el uno al otro la yihad [una "guerra santa"]", cita TASS a Nabi Jan Malakhail, el jefe regional del Ministerio del Interior de la provincia sureña afgana de Helmand.
"Es obvio que el EI fue creado en Afganistán por los servicios de inteligencia extranjeros con el fin de mantener el grado deseado de tensión, así como para impedir las conversaciones de paz entre el Gobierno afgano y los talibanes", afirmó.
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Según él, el líder del Estado Islámico Abu Bakr al Baghdadi definió al fundador de los talibanes, el mulá Mohammad Omar, como un "comandante de campo analfabeto", que "no merece la confianza". Al mismo tiempo, los líderes talibanes instaron a sus partidarios a "resistir al EI y no dejarle elevar su bandera sobre Afganistán".
En enero, el Estado Islámico anunció la creación de "emirato de Khorasan", que incluye a Afganistán, Pakistán, India y Bangladesh. Según los expertos, recientemente ha habido un importante fortalecimiento de las posiciones de los extremistas en las provincias afganas del este y sur -Logar, Paktia, Gazni, Zabul, Helmand-, y en el norte del país -Kunduz, Jawzjan y Parwan-. Al mismo tiempo, más y más comandantes de campo y militantes talibanes juran lealtad al grupo yihadista.