El submarino Krasnodar es el cuarto de los seis submarinos de tercera generación que forman parte del proyecto submarino Varshavianka, que en Occidente ya han recibido el apodo de 'agujero negro' debido a que resultan casi invisibles para los radares más sensibles de la OTAN, escribe la página web de la revista estadounidense 'The National Interest'.
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"La llegada de los submarinos es un evento significativo para nuestra Flota. En otoño de este año dos submarinos pasarán a formar parte de la Flota del Mar Negro. Luego, de acuerdo con lo programado, los seis submarinos se trasladarán a la Flota del Mar Negro después de las pruebas en la Flota del Norte", ha declarado el comandante de la Fuerza Naval de Rusia, el almirante Víktor Chirkov, citado por la Televisión Pública de Rusia.
Los submarinos de tercera generación tienen un desplazamiento total en inmersión de 3.100 toneladas, alcanzan una velocidad de 20 nudos, su profundidad de inmersión es de 300 metros y pueden dar cabida a una tripulación de 52 personas. Están armados con torpedos de calibre 533 milímetros, minas, y misiles Calibre.
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Los submarinos de esta serie pueden detectar un blanco a una distancia entre tres y cuatro veces mayor que la que requiere el enemigo para detectarlos a ellos. Los seis submarinos de la serie deben estar construidos para 2016, momento en que pasarán a formar parte de las fuerzas submarinas de la Flota del Mar Negro.