"Con profunda preocupación debemos que afirmar que desde hace un año el sistema judicial de Ucrania no ha dado ningún paso concreto para que tenga lugar una investigación independiente e imparcial que podría llevar ante la justicia a los responsables de este horrible crimen", reza un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia difundido con motivo del primer aniversario de los trágicos acontecimientos ocurridos el 2 de mayo de 2014.
Ese día decenas de oponentes al Gobierno actual de Kiev murieron a raíz de un incendio en la Casa de los Sindicatos de Odesa, tras protagonizar violentos enfrentamientos con miembros del grupo radical Sector Derecho y sus simpatizantes. La tragedia dejó un balance de 48 muertos y más de 200 heridos.
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"Como resultado de estos actos barbáricos de intimidación, fueron asesinadas decenas de personas cuyo único crimen fue expresar abiertamente su postura cívica contra el golpe anticonstitucional de febrero de 2014 y el auge de los ultranacionalistas radicales", declaró la Cancillería rusa.