¿Por qué los ejercicios ruso-chinos en el Mediterráneo alarman a Occidente?
El 17 de mayo comenzó en el Mediterráneo la fase activa de los ejercicios ruso-chinos 'Cooperación Naval 2015', que durará hasta el 21 de mayo. En los ejercicios interactúan 9 barcos: 3 proporcionados por la parte china y 6 por Rusia.
El reportero destaca que los ejercicios conjuntos ruso-chinos se realizan en el Pacífico desde 2012, pero esta es la primera vez que tienen lugar en el Mediterráneo. Y mientras que el escuadrón del Mediterráneo de la Armada rusa está presente en la región desde hace varios años, la Armada china hasta 2015 no llevó a cabo ejercicios tan lejos de sus costas.
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El trasfondo de la política exterior
Según Jrolenko, los ejercicios se llevan a cabo en un clima de turbulencia política en el mundo y las sanciones antirrusas iniciadas por EE.UU. El experto señala que la participación de China en las maniobras es una señal político-militar hacia EE.UU., que interfiere en los asuntos de Pekín en el Mar de China Oriental y el Mar de China Meridional.
Probablemente, añade el analista, la salida de la Marina china al Mediterráneo es también una respuesta al aumento de la cooperación militar entre EE.UU. y Japón. A finales de abril, los ministros de Defensa de EE.UU. y Japón firmaron un acuerdo para ampliar la cooperación militar, según el cual Washington se comprometió a suministrar a Japón armamento avanzado y sistemas de defensa antimisiles, y el país asiático, a proporcionar ayuda militar a los estadounidenses en caso de agresión por terceros países.
El iniciador es China
De acuerdo con la Armada de Rusia, llevar a cabo ejercicios en el Mediterráneo fue propuesto por China. Para el país asiático es una buena oportunidad de probar sus actualizadas fuerzas navales. Sin embargo, los organizadores han señalado en repetidas ocasiones que los ejercicios no están dirigidos contra un tercer país y no tienen nada que ver con la situación en la región.
Analistas chinos subrayan que los ejercicios conjuntos en la región del Mediterráneo crearán una presión adicional sobre EE.UU. y la OTAN. Según el experto naval Li Jie, los ejercicios en el Mediterráneo también son para China una oportunidad de avanzar en sus intereses económicos. En los ejercicios a miles de kilómetros de sus bases, los marineros no están preocupados por la presión política o efectos externos, sostiene el observador.
La repercusión en los medios de comunicación
Los principales medios occidentales ven en las maniobras de Rusia y China el surgimiento de una nueva alianza como contrapeso a EE.UU. y sus aliados. Según la revista estadounidense 'National Review', los ejercicios destacan "el deseo de China de ayudar a Rusia a enfrentar el poder estadounidense".
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El diario suizo 'Tages-Anzeiger' también hace hincapié en que la amistad entre Moscú y Pekín fue más allá de la política y la economía. "Forman una alianza en la esfera militar para crear un contrapeso a EE.UU. y sus aliados europeos y asiáticos".
Por su parte, 'Los Angeles Times' escribe: "Ni Rusia ni China tienen una pulgada de costa mediterránea, y esto hace que la idea de celebrar los primeros ejercicios navales conjuntos en el mar Mediterráneo se vea como inesperada e incluso provocativa […] La esencia de lo que está sucediendo es obvia: una nueva y poderosa alianza de gigantes del Este decidió mostrar sus músculos en las proximidades de Europa Occidental". A juicio de Jrolenko, todo esto se parece a un leve pánico.
Al mismo tiempo, el columnista recuerda que EE.UU. tampoco posee ni una pulgada de costa en el mar Báltico y el Mar Negro, pero los ejercicios de la OTAN con participación de personal militar estadounidense se celebran allí regularmente.
La consolidación de los resultados del año pasado
En 2014, los ejercicios ruso-chinos 'Cooperación Naval 2014' se realizaron en el Mar de China Oriental. Hoy en día, concluye el experto, en el mar Mediterráneo las Armadas de Rusia y China consolidan la experiencia del año pasado, aumentan la preparación sinérgica para el combate y la comprensión mutua.