El pasado mes de abril, tras una serie de negociaciones en Lausana, Irán y el Sexteto (EE.UU., Rusia, China, Reino Unido, Francia y Alemania) alcanzaron un acuerdo marco sobre el programa nuclear iraní, que tiene como objetivo restringirlo a cambio del levantamiento de sanciones internacionales contra Irán.
Expertos en las negociaciones sobre el programa nuclear de la nación persa seguirán trabajando esta noche en Viena. En la mañana del martes se reunirán los cancilleres, después de lo cual tendrá lugar una reunión plenaria de los representantes de las partes, según explicó la vicejefa del departamento de prensa de la Cancillería rusa, María Zajárova.
Inicialmente, el 30 de junio estaba previsto como fecha límite para especificar los detalles de ese acuerdo, No obstante, la fecha se ha aplazado varios días debido a distintos puntos de desacuerdo que aún existían entre las partes. Está previsto que el acuerdo final se anuncie el lunes 13 de julio después de que se resuelva el 99 por ciento de los asuntos, según un funcionario iraní. El ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius, también confirmaba que las negociaciones se encuentran en la "fase final".
Trasciende parte del borrador del acuerdo final
Mientras se informa que el acuerdo histórico sobre el programa nuclear iraní podría ser anunciado este martes por la mañana, varias agencias de noticias dan a conocer algunos puntos clave del documento.
Así según Reuters, el acuerdo prevé que el personal del Organismo Internacional de Energía Atómica OIEA podrá tener acceso por una sola vez a la instalación de la base de Parchin, al sureste de Teherán.
También se informa que el arreglo de la cuestión nuclear de Irán, en su dimensión militar, será la condición para el levantamiento de las sanciones contra el país persa.
El acuerdo final sobre Irán no incluirá una disposición sobre el levantamiento inmediato de las sanciones contra Teherán, según una fuente de RIA Novosti.
La UE planea congelar las sanciones contra Irán hasta el fin del año, según comentó a TASS una fuente diplomática europea. "Después de la conclusión de un acuerdo final se congelarán las restricciones hasta final de año. Durante ese tiempo se acordarán todas las cuestiones para las completa abolición de dichas restricciones", precisó el diplomático.
Los avances alcanzados
Centrífugas
En Lausana, Irán aceptó reducir el número de sus centrífugas (unas 19.000), instaladas en Natanz y Fordow, a 6.104. Asimismo, Teherán aceptó no enriquecer uranio más que al 3,67 por ciento durante al menos 15 años, un porcentaje muy inferior al 90 por ciento necesario para fabricar armas, informa Reuters.
Plutonio
Irán prometió no utilizar las instalaciones de Arak para la producción de plutonio de uso militar. Asimismo, no construirá reactores de agua pesada adicionales durante los próximos 15 años.
Inspecciones
Bajo el acuerdo, los inspectores internacionales tendrán acceso a toda la cadena de suministro del complejo nuclear iraní, no solo a las instalaciones que enriquecen uranio sino también a las minas de uranio, las fábricas que producen la maquinaria de centrífugas y las instalaciones de almacenamiento. El régimen de inspección durará entre 20 a 25 años. Asimismo, Irán ha aceptado firmar el Protocolo Adicional del Organismo Internacional de Energía Atómica, que otorga a los inspectores el acceso a las instalaciones declaradas y no declaradas, informa 'The Financial Times'.
Cuestiones de desacuerdo
Levantamiento y reimposición de sanciones
Uno de los puntos de desacuerdo entre las partes ha sido el momento y el ritmo del levantamiento de las sanciones contra la República Islámica. Mientras Irán insistía en que las sanciones se suprimieran inmediatamente después de firmar el acuerdo, los funcionarios estadounidenses afirmaban que las sanciones se relajarían durante un período de varios meses (o incluso más) a medida que Irán satisfaga los requisitos del acuerdo para reducir su programa nuclear, informa 'The Washington Post'.
La República Islámica rechaza las acusaciones de Occidente, que considera que Teherán se vale del programa para encubrir la fabricación de armas nucleares en secreto y defiende sus fines pacíficos, tachando las sanciones occidentales de ilegales e infundadas.
No obstante, un miembro del equipo negociador de Irán que participa en las conversaciones nucleares en Viena ha declarado recientemente que el borrador del acuerdo sobre el programa nuclear iraní prevé que todas las sanciones económicas y relacionadas con el sector bancario contra la República Islámica se levantarán inmediatamente después de la adopción del acuerdo. Sin embargo, algunas restricciones temporales permanecerán en vigor durante cierto tiempo, informa la agencia Fars.
Otro asunto en cuestión durante las negociaciones ha sido la elaboración de un mecanismo para la posible reimposición de sanciones en caso de que Irán viole el acuerdo.
Acceso de los inspectores internacionales a las instalaciones militares
Otro tema sobre el que las partes tenían que alcanzar el acuerdo es el acceso de los inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica a las instalaciones iraníes. Mientras que el líder supremo de la República Islámica de Irán, Alí Hoseiní Jameneí, ha anunciado que tanto el acceso de los inspectores a las instalaciones militares como las entrevistas a los científicos nucleares serían prohibidas, funcionarios occidentales aseguran que los negociadores iraníes aseguraron que el acceso sería posible, informa Reuters.
Al mismo tiempo, el ministro de Exteriores de Francia, Laurent Fabius, había insistido en que "una verificación sólida de las instalaciones, incluidas las bases militares en caso de ser necesario", es una de las condiciones clave para un acuerdo nuclear fuerte.
Investigación futura de Irán
Otro punto de discusión ha sido la escala de la futura extensión del programa iraní de investigación y desarrollo de enriquecimiento por centrifugación. En el caso de las centrífugas avanzadas, EE.UU. afirmó que Irán puede emprender un programa de desarrollo e investigación "limitado". A los diez años, Teherán debería adherirse a un plan de desarrollo de investigación que se presentará a la OIEA. Por su parte, Jameneí anunció que Irán no aceptaría ni la primera década de restricciones, calificando dichas exigencias de "coacción excesiva", informa AP.