Las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk están dispuestas a retirar, de forma unilateral, armamento con calibre no superior a 100 mm a tres kilómetros de la línea de división, según se ha informado en un comunicado conjunto el líder de la República de Donetsk, Alexánder Zajárchenko y el representante de la República de Lugansk en el grupo de contacto, Vladislav Deinegi.
"Mostrando compromiso con los acuerdos de Minsk, estamos dispuestos a dar el siguiente paso hacia la paz y para eso, retirar nuestras divisiones de tanques y vehículos blindados, equipados con armas con calibre hasta 100 mm, de la línea de división a una distancia de al menos 3 kilómetros", ha anunciado Zajárchenko.
"Quiero precisar que estamos dispuestos a hacerlo en todo el frente, excepto zonas problemáticas", que incluyen regiones al norte de Donetsk y Debáltsevo, ha añadido Zajárchenko. En total, estas regiones conforman tan solo entre un 10 y 12 por ciento de la línea de división.
Por otra parte, la República Popular de Donetsk ha expresado la voluntad de realizar "en cualquier formato" un diálogo sobre la retirada de armamento de las zonas problemáticas, pero "solamente con aquellos representantes de la parte ucraniana que tengan poderes reales".
Vladislav Deinego igualmente ha anunciado su disposición de retirar armamento bajo las mismas condiciones, precisando que "la única excepción es la región de la localidad Schastie". "De allí estaremos dispuestos a retirar armamento y la técnica restante solo después de que la parte ucraniana cumpla con las mismas obligaciones en otras zonas", ha comentado Deinego.
Posteriormente, Pushilin ha expresado la esperanza de que el control de la retirada de armamentos sea efectuado por la OSCE, añadiendo que la correspondiente notificación ya se ha enviado. Por otro lado, el representante de la República Popular de Donetsk ha comentado que espera la reacción de Kiev, después de la cual estarían dispuestos a empezar a realizar acciones concretas.
El acuerdo sobre la retirada del armamento está a punto de firmarse
Actualmente, tienen lugar arduas discusiones sobre el acuerdo de la retirada del armamento de Donbass, ha anunciado el vicepresidente del Consejo Nacional de la República Popular de Donetsk, Denís Pushilin en una rueda de prensa, informa Ria Novosti. "Prácticamente estamos llegando a una versión definitiva", y solo quedan por acordar "los últimos detalles y firmar el documento", ha agregado.
No obstante, Pushilin ha comentado que Kiev intenta ralentizar el proceso. "La parte ucraniana encuentra a último momento razones, nuevos pretextos, nuevas interpretaciones de puntos concretos, vuelve a la versión vieja, y el proceso se nos estanca", ha comentado el representante de Donetsk.
Anteriormente, se había informado que las próximas reuniones del grupo de contacto en Minsk están previstas para el 21 de julio, y el 3 y el 26 de agosto. "Estamos dispuestos a dar muchos pasos para el encuentro, pero tiene que ser mutuo. Espero que esto se tenga en cuenta en Minsk y que en la próxima reunión se firme el documento", ha expresado Pushilin.
A su vez, el representante de la República Popular de Lugansk, Vladislav Deinego, ha expresado apoyo a su homólogo de Donetsk. "La República Popular de Lugansk apoya las iniciativas de la República Popular de Donetsk en la parte de la rápida normalización de la situación en Donbass. Por nuestra parte, también estamos dispuestos a adoptar todos los pasos previstos en los acuerdos de Minsk y previamente acordados para la estabilización de la situación en la línea de división", ha anunciado Dainego.
A principios de julio, el vicetitular de la Misión de observación especial de la OSCE, Alexander Hug, confirmó que las autodefensas de Donetsk habían retirado sus fuerzas armadas de la localidad de Shirókino. A su juicio, la parte que viola las condiciones de retirada del armamento pesado de la línea de contacto establecidas por los acuerdos de Minsk es el Ejército Ucraniano.
En la opinión de la analista política Francisca Quiroga, el principal obstáculo para la solución del conflicto actual consiste en que hay un gran número de intereses geopolíticos presentes. No obstante, la situación es aún más complicada debido a los "conflictos políticos internos" dentro de la propia Ucrania, ha precisado la analista, poniendo como ejemplo los sectores de ultraderecha. Asimismo, Quiroga ha insistido en que una parte de la solución del problema debería estar en la implementación de "reformas políticas sustantivas" en lugar de "apuntar al enemigo externo".
Con respecto a la retirada de armamento, la analista ha denunciado la "falta de voluntad política" de realizarlo por parte de Kiev y, además, ha expresado que "la UE debería hacerse cargo también de potenciar este paso de negociación y ser muy claro en que esto debe realizarse de forma inmediata".