Desde la final de la Segunda Guerra Mundial, EE.UU. ha contado con los mejores aviones de combate del mundo, según la opinión de Evan Gottesman de la revista 'The National Interest'. De este modo, el mayor 'rival' de Washington durante la Guerra Fría, la Unión Soviética, a menudo construía sus aviones avanzados como respuesta a las aeronaves norteamericanas.
Los diseños estadounidenses siguen siendo de los más deseados por los ingenieros de las Fuerzas Armadas de todo el mundo, lo que demuestra el último gran proyecto norteamericano, el caza F-35, opina el experto y destaca los cinco aviones de combate más mortíferos de EE.UU.
F/A-18 Hornet
El caza polivalente F/A-18, desarrollado en los años 70 por la empresa McDonnell Douglas (integrada actualmente en Boeing), se destaca por su versatilidad y además de la Marina norteamericana está en servicio en Canadá, Australia, Finlandia, Kuwait, Malasia, España y Suiza. Su radio de combate alcanza más de 900 kilómetros mientras que su velocidad es mayor a Mach 1.7.
El Hornet puede equiparse con una gran variedad de sistemas de armamento por lo que puede llevar a cabo tanto misiones de combate como de ataque. De este modo, en el caso de un combate aire-aire puede portar los misiles de corto alcance Sidewinder o de medio alcance AIM-120 AMRAAM. A su vez, las bombas guiadas por láser Paveway, de la compañía Raytheon, se usan para las misiones de ataque.
F-22 Raptor
El caza de superioridad aérea furtivo F-22 Raptor de la empresa Lockheed Martin representa el mayor logro de la tecnología militar estadounidense, opina Gottesman. Entró en servicio en 2005 y por su importancia, el gobierno norteamericano impuso una prohibición a la exportación de la aeronave. Su par de motores F119-PW-100, permiten al caza de quinta generación alcanzar una velocidad de Mach 1.8. Al mismo tiempo es importante su configuración: todos los sistemas de armas se encuentran en el interior de la aeronave lo que mejora sus capacidades furtivas y reduce la resistencia.
Está equipado con una serie de armas que hacen esencial la presencia del avión en los combates aire-aire y operaciones aire-tierra. En septiembre de 2014 el F-22 participó en su primer misión de combate: el caza norteamericano junto con las fuerzas aéreas árabes realizaron varios ataques contra las posiciones del Estado Islámico en Siria.
F-35 Joint Strike Fighter (JSF)
El desarrollo del caza polivalente furtivo de quinta generación F-35, conocido también como Lightning II, fue financiado principalmente por EE.UU. aunque el apoyo lo prestaron también Canadá, Australia, el Reino Unido, Turquía, Italia, los Países Bajos, Dinamarca y Noruega. El avión se usa por el Cuerpo de Marines de EE.UU. A partir de 2016, la aeronave entrará en el servicio de la Fuerza Aérea norteamericana mientras que en 2018 lo recibirá la Armada. Objeto de críticas por su inmenso costo, el F-35 promete ser una poderosa herramienta para el Ejército estadounidense y sus aliados, escribe el experto.
Igual que el F-22, el Lightning II es casi 'invisible' para los radares. Su radio de combate es de más de 1.100 kilómetros y la velocidad asciende a Mach 1.6. En relación al armamento se diferencia del Raptor por la posibilidad de portar una bomba nuclear B61. Además de EE.UU., todos los países que financiaron el proyecto también emplearán el caza para sus fuerzas armadas. A su vez, Israel, Singapur, Japón y posiblemente Corea del Sur, podrían comprar la aeronave para sus ejércitos.
MQ-9 Reaper
El MQ-9 es un vehículo aéreo de combate no tripulado diseñado por el fabricante General Atomics para realizar ataques contra objetivos en tierra. Desde su entrada en servicio en 2007, el dron fue desplegado en Afganistán y en la frontera de EE.UU. con México. Dispone de un radio de combate de más de 1.800 kilómetros y una velocidad de hasta 480 kilómetros por hora. Al mismo tiempo, es capaz de transportar unos 1.800 kilogramos de armamento.
El dron puede ser equipado con una serie de armas, entre las cuales se encuentran las bombas guiadas por láser Enhanced Paveway II o los misiles para destruir vehículos de combate Hellfire II. Sofisticadas cámaras permiten a la aeronave realizar misiones de vigilancia. Fuera de los EE.UU., el MQ-9 se usa también por sus aliados de la OTAN, Italia y el Reino Unido.
B-2 Spirit
El bombardero estratégico furtivo B-2 fue diseñado a finales de la Guerra Fría y entró en servicio en 1997. Actualmente se usa exclusivamente por la Fuerza Aérea de EE.UU. Puede volar más de 11.100 kilómetros sin recarga de combustible y alcanzar velocidades subsónicas. Además del armamento convencional, la aeronave puede portar bombas nucleares B-61 y B-83. Aún más, Washington realizó una serie de actualizaciones para que el avión sea capaz de llevar el Massive Ordnance Penetrator, la mayor bomba convencional del mundo.
El avión fue desplegado para misiones en Kosovo, Afganistán e Irak. Las autoridades norteamericanas hasta barajaron la idea de usarlo para el bombardeo de la base de Osama Bin Laden en Pakistán, pero la misión al final fue realizada por el arsenal de la fuerza de operaciones especiales Navy SEALs.