Según los últimos datos, 22 personas han muerto y al menos 123 han resultado heridas tras el atentado. Un portavoz policial indicó que se trata de "un ataque terrorista".
La explosión ocurrió en un distrito de negocios en las inmediaciones del Santuario de Erawan, una importante atracción turística de la capital tailandesa.
Oficinas cercanas al lugar de los hechos han sido evacuadas, según varios informes en las redes sociales.