La presidenta surcoreana ha convocado una reunión urgente del Consejo de Seguridad Nacional.
Las autoridades de Seúl están evacuando a los residentes de varios pueblos fronterizos.
Según la agencia Yonhap, el fuego norcoreano, al parecer, tuvo la intención de alcanzar uno de los altavoces que el Sur utiliza para emitir propaganda contra el gobierno de Kim Jong-un.
La agencia no informa sobre posibles daños materiales o personales.
Las Fuerzas Armadas de Corea del Sur han sido puestas en máxima alerta, según informó la agencia surcoreana.
Por su parte Corea del Norte amenaza con iniciar acciones militares si Seúl continúa con su guerra psicológica, según Yonhap.
El Ministerio de Defensa de Corea del Sur afirmó que Pionyang le ha dado 48 horas a Seúl para que abandone sus transmisiones propagandistas.