El estado de excepción ha sido decretado por el presidente para un período de 60 días, prorrogable por 60 días más. "El objetivo es restablecer el orden, la paz y la justicia", ha comunicado Maduro. Ha precisado que se iniciará un proceso profundo de reorganización de la vida económica y cultural y de la seguridad ciudadana en la frontera.
La medida decretada afecta a los municipios de Bolívar, Ureña, Junín e Independencia, en el estado de Táchira, detalla NTN24. Para resguardar la zona, en Táchira ya han sido desplegados 2.500 militares de la Guardia Nacional Bolivariana y se seguirá fortaleciendo, ha informado Maduro.
Según el mandatario, la decisión es necesaria para "combatir todas las formas de paramilitarismo en el país" y sigue la entrada en vigencia del cierre del paso entre ambos países durante 72 horas.
No ha habido otra alternativa que tomar estas dos medidas, ha explicado Maduro, apelando al ataque de presuntos contrabandistas la noche del miércoles en la frontera, que dejó heridos a tres militares venezolanos y un civil.
Se ha dirigido también a los ciudadanos, a los que llama a unirse para hacer frente a las conspiraciones de la derecha, en una explícita alegación a sus denuncias anteriores, en las que comunicaba que el expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez y la derecha venezolana están promoviendo planes paramilitares en el país.
#FOTO: .@NicolasMaduro: "Llamo a todo el pueblo de nuestra región fronteriza a la conciencia queridos hermanos" pic.twitter.com/TI67Idb2t8— Prensa Presidencial (@PresidencialVen) 22 августа 2015
Una vez decretado, el régimen de excepción supone restricciones temporales de algunas garantías constitucionales. El Gobierno se guarda el derecho de implementar la medida cuando se dan circunstancias extraordinarias que afectan gravemente la seguridad de las personas, del pueblo o de las instituciones.