Un funcionario del Gobierno ha declarado que las tropas turcas cruzaron la frontera con Irak como parte de una "persecución en caliente" y operación "a corto plazo" contra las milicias del Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK), que supuestamente participaron en un ataque con bomba que mató a 16 soldados el pasado domingo, informa AP.
Además, el funcionario, que ha hablado bajo la condición de anonimato, ha afirmado que "ésta es una medida a corto plazo destinada a impedir el escape de los terroristas".
Según la agencia Dogan, que cita fuentes militares anónimas, han sido dos los batallones de fuerzas especiales turcas que han cruzado la frontera.
Voces occidentales han criticado la postura de Ankara, que actualmente lleva a cabo misiones de bombardeo contra las milicias kurdas basadas en Siria e Irak pero no contra miembros del Estado Islámico en el mismo territorio. Ankara considera a los kurdos como una amenaza para la integridad de Turquía, etiquetándolos como terroristas. Sin embargo, ellos han sido la única fuerza terrestre en la región que han logrado algún éxito en la lucha contra el Estado Islámico.
En este sentido, el analista político Yusuf Fernández ha declarado a RT que la ofensiva del gobierno de Recep Tayyip Erdogan contra los rebeldes kurdos en Irak hará que el Estado Islámico "disfrute de una mejor posición con la que contaba cuando estaba bajo la presión de estos combatientes".